El fabricante del rombo ha recuperado el récord en el conocido como «Infierno verde» de Nürburgring de la mano de un especialísimo Mégane RS 275 Trophy-R: ha completado la vuelta al bucle norte del famoso trazado germano en 7 minutos y 54 segundos, rebajando la anterior plusmarca para modelos de tracción delantera, en poder del Seat León Cupra, en 4 segundos.
Al hilo de la gesta, Renault ha subido en 10 caballos la potencia de su Mégane Trophy hasta acariciar los 275 CV/360 Nm (de ahí la nueva denominación Mégane Trophy 275). El propulsor es, como de costumbre, un 2.0 de gasolina con 4 cilindros y turbocompresor.
Entre otros, y para lograr esas poderosas cotas, cuenta con un inédito escape de titanio firmado por el especialista Akrapovic que, de paso, es más ligero que el escape de serie y ofrece una sonoridad superior.
Incluye diferencial de deslizamiento limitado configurable, amortiguadores ajustables Öhlins Road & Track con muelles de acero tomados del coche de rallys Mégane N4 y neumáticos Michelin Pilot Sport Cup 2 creados específicamente para la nueva versión.
Pintado en un llamativo amarillo con sello Trophy, y calzado sobre llantas negras de 19 pulgadas modelo Speedline Turini, el habitáculo se beneficia de butacas Recaro tapizadas en Alcántara, rematadas por costuras rojas.
Junto a estos, detalles como el pomo del selector del cambio (manual y de 6 marchas, con desarrollos específicos) ultimado en aleación, o el volante y e fuelle del freno de mano, que de nuevo son de Alcántara.
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